El Partido Republicano de Castellón (1868-1936).

Per Germán Reguillo

3.1.2.4.      Anticatalanismo.

"El catalanismo es una solución actual para Cataluña; representa una fuerza cuyo punto de aplicación está en Madrid y que pretende y logra que todas las regiones de España sean feudatarias de Cataluña. Al grito de vixca Cataluña bien podría añadir aunque se muera de hambre y de miseria el resto de la nación" (1).

 

Esta apreciación subjetiva, quizás un tanto injusta y hasta demagógica, si cabe, procede de un hombre cualificado del PR-CS, integrado en el sector federal, amigo personal de don Fernando Gasset, y de reconocido prestigio en Castellón como médico: el doctor Vicente Gea. Pero es la manifestación de una opinión y de una actitud generalizada en el PR-CS. Las raices de este anticatalanismo, que por otra tampoco era exclusivo del PR-CS, procedían de dos hechos evidentes:

a)      la ambigüedad y la confusión en unos casos y la certeza en otros, del catalanismo respecto a la unidad de España.

b)      el recelo y el temor hacia la expansión del catalanismo cultural, político, e incluso económico, en Valencia. Como manifestaba Alvaro Pascual Leone, el diputado radical por Castellón, con motivo del Estatuto de Autonomía:

(...) La región valenciana no puede ser integrada más que por Castellón, Valencia y Alicante, y aún aparecería algún pancatalanista que sueñe, en sus delirios históricos con la anexión a Cataluña, puesto que el historicismo nacionalista constituyó en Valencia un cultivo cuidadoso del catalanismo (2).

Estos temores siguen vigentes. En la actualidad sectores cualificados de opinión estiman que cuando se habla de Cataluña se presupone la existencia de una Cataluña más amplia en el cual se halla comprendido el Reino de Valencia. Esta actitud sería una actitud relativamente reciente y sin ningún fundamento histórico (3). Como dice el profesor Villapalos (...) "La Confederación Catalano Aragonesa no existió nunca, eso es un invento de la historiografía del siglo pasado con Bofarull. Los reinos de la Corona de Aragón estaban separados, con parlamento propio. Este tipo de denominaciones, anteponer lo catalán, la confederación, a la realidad Corona de Aragón, no responden a la realidad histórica y llevan a la confusión" (4). Es la misma tesis mantenida por el profesor Alfonso García-Gallo, quien añade que resulta más exacta la expresión que en la época siguiente se generaliza para designar este conjunto, de Corona de Aragón (5).

Sin embargo, un reducido sector, aunque cualificado, de Castellón, defendía el origen histórico y cultural de Castellón dentro del área cultural unos, y cultural-político otros, de Cataluña. Como un botón de muestra de la tendencia cultural , LLUIS REVEST afirmaba:

Creem que la llengua valenciana és, i no res més, dels catalans, qui la parlaren cuan a la conquesta i per esta raó és que els filólegs, anomenant-la del poble qui primer la parlá, la conoixem universalment per CATALANA -en letra mayúscula en el original- (6).

En el año 1.902, desde la Revista "Ayer y Hoy" se le reprochaba a Gaetá Huguet Segarra de ser un "valencianista exaltado" -sic- que por temor a todo lo castellano, y como todos los valencianistas de este tipo "se arrojan en brazos del catalán y aún del francés sin percatarse de que filológicamente tan extranjeros son éstos como aquellos en nuestra región" (7). Y a continuación el autor del artículo, José Nebot y Pérez, cuya filiación política desconocemos, añade un párrafo que no tiene desperdicio y que muy bien podría ser grabado actualmente en el frontispicio actual de esta polémica:

(...) y es que no quieren convencerse los VALENCIANISTAS A ULTRANZA -con letra mayúscula en el original- de que en Valencia resulta imposible y hasta inocente la pretensión de implantar el regionalismo traducido del catalán (8).

Desde la concepción federal de España los republicanos armonizaban el amor a España y a Cataluña, en opinión de don Alejandro Lerroux, pero con expreso rechazo de todo separatismo (9). Además, este rechazo no fue una actitud aislada de Pi y Margall o de Lerroux, sino también del blasquismo y de PR-CS, independientemente de que tanto en el blasquismo (10) como en el PR-CS existiesen actitudes personales valencianistas. Pero en lineas generales el anticatalanismo fue la actitud general (10). No deja de llamar la atención que incluso desde "Rebeldía" la revista republicana juvenil, hostil a don Fernando Gasset (11), se reaccionase con indignación por el nombramiento en Castellón de un representante de Cambó. Se consideraba una intervención extraña que hería las fibras más sensibles de Castellón. El regionalismo catalán no era exportable a Castellón y desde "Rebeldía" se invitaba a los seguidores de Cambó de Castellón a la consiguiente rectificación.

Deseamos regionalistas y federales la autonomía municipal, la libertad provincial, la independencia regional, olvidar estos principios admitiendo imposiciones desde Barcelona equivaldría a perder nuestra personalidad como castellonenses, como valencianos; sería trasladar la cuna del caciquismo de Madrid a Barcelona y continuar sumando beatificamente las imposiciones de la nueva oligarquía (13).

Desde algunos sectores del valencianismo, normalmente de tendencia izquierdista, se intentaba deslindar éste del "cambonismo" y de la "Lliga Regionalista". La ideología valencianista no podía estar supeditada ni inspirada en Cambó. "El valencianisme idea may pot estar supeditat a ninguna persona ni inspirat en cap organisme" (14). Para estos valencianistas una cosa muy distinta era la afinidad espiritual con Cataluña y otra los simples contactos que tampoco querían decir supeditación ni alianza. "De la mateixa manera que Cambó no vol dir res en valencianisme, no diu tampoc que no siga tot en catalanisme. Sera el capitost de la "Lliga" que es un organisme electoral, pero no la plasmació del sentir catalanista que te tronques importantissimes que no sols no son afins sino hostils a l´actuació de l´amic del rei i consentidor de l´aventura del Marroc" (15).

El desastre de 1.898 ofreció al catalanismo la oportunidad de conquistar una amplia audiencia entre las clases medias. La victoria electoral de 1.903, de los catalanistas contra los republicanos de Lerroux y los partidos dinásticos se convirtió en la LLIGA REGIONALISTA. Como dice Raymond Carr fue la fuerza política más eficaz que el catalanismo había de crear con anterioridad a 1.930-1.931 (16). La Lliga trató de conquistar simpatías en toda España. Para la izquierda catalana la Lliga era doblemente sospechosa: era una organización conservadora incapaz de competir con Lerroux; era una organización de hombres prácticos preocupados por conseguir resultados, incluso sacrificando la pureza nacionalista de sus aspiraciones (17).

Las demandas catalanistas eran seguidas con preocupación en Castellón. Don Fernando Gasset estimaba que el federalismo como sistema orgánico autonómico era más conveniente para España que el sistema meramente regionalista, consideraba que a Cataluña le convenía menos que a otra región la independencia -sic- (18), porque económicamente vivía gracias a la protección arancelaria. Aceptada la tesitura de un plebiscito para resolver el contencioso catalán don Fernando Gasset se adhería a los resultados de la voluntad expresada en las urnas:

Estimo que la voluntad de los pueblos es siempre soberana y debería acudirse a Cataluña para que un plebiscito resolviera respecto a ella misma. Si en su exacerbación del sentido regionalista o nacionalista como ahora le llaman llegara a votar su independencia debería concedersela sin más condiciones que aceptar una parte de los compromisos de Estado referentes a deuda pública, funcionarios y otros semejantes. Es imposible retener a quién no quiere vivir asociado y no debe repetirse lo de Cuba con la amenaza de perder el último hombre y la última peseta para terminar en una fuerza desastrosa (19).

Las elecciones legislativas de 1.918 suscitan en el PR-CS, nuevamente el sentido anticatalanista. Ya hemos visto anteriormente que Cambó había designado un representante suyo en Castellón lo cual produce la natural irritación. Estas elecciones de 1.918, según Miguel M. Cuadrado, constituían una útil coyuntura para comprobar el balance de fuerzas existentes en el tablero político español (20). Para Cuadrado, la "Lliga" es la vencedora moral de estas elecciones (21). En el caso de Castellón, en una operación similar a la del Partido Reformista de Miguel Roca, los regionalistas -representantes de la "Lliga", designan como candidato a un tal Joaquín María Nadal Ferrer. El propio don Fernando Gasset, en la campaña electoral a favor del candidato republicano Emilio Santa Cruz combatió la intromisión catalana de la "Lliga" en varias provincias, entre ellas Castellón, a través del Partido Regionalista. Según don Fernando Gasset los dirigentes del Partido habían sido impuestos desde Cataluña, así como el candidato por el distrito de Castellón, Joaquín Mª Nadal Ferrer y el del distrito de Segorbe. Este candidato "cunero" ni siquiera había participado en la campaña electoral. La nominación del Sr. Nadal Ferrer, para don Fernando Gasset, rompía la convención de los partidos castellonenses para que la designación de sus candidatos "recayera en  hijos de los respectivos distritos, comprovincianos distinguidos, personalidades residentes desde hace años o que tuvieron intereses creados en cualquiera de aquellos y si acaso hombres ilustres jefes de partidos regionales" (22).

La irritación republicana tenía otra justificación. La presentación de la candidatura regionalista había hecho inaplicable el artº 29 de la Ley Electoral. Santa Cruz necesariamente tenía que competir en la campaña electoral, pese a encontrarse enfermo en aquellos momentos (23).

Además de estas razones coyunturales, para los republicanos, entre Cataluña y Valencia, existían antagónicos intereses económicos. Cataluña necesitaba el proteccionismo. Valencia de la liberalización de aduanas para la exportación de sus productos. Y esencialmente, latía, a su modo, una concepción emocional de la unidad de España:

(....) sabiendo que el Reino de Valencia constituido en Estado republicano libre, podría llegar a ser poderoso, preferimos por nuestro amor a la unidad nacional y de España, sufrir las consecuencias de hoy y vivir en relación constante, como hermanos, con los demás pueblos ibéricos, incluso con los de Cataluña. Es decir, nos honramos más siendo hijos fieles de España que valencianos egoístas (24).

La candidatura catalanista del señor Nadal Ferrer obtuvo en Castellón capital 16 votos -y como decía con razón y con cierta ironía el cronista electoral de "El Clamor", "o sea un número igual al de regionalistas existentes en Castellón" (25)-. La candidatura de Santa Cruz quedó asegurada con 4.951 votos en la capital (26). la diferencia es abrumadora y está dentro de la linea de continuos triunfos electorales del PR-CS.

El Estatuto de Autonomía de Cataluña, ya en la II República, destapó nuevamente el anticatalanismo del PR-CS. Este era un tema abordado por "el radicalismo desde sus propios comienzos como partido. En la preparación de la reunión que dio lugar el ´Pacto de San Sebastián´ una de las dificultades mayores fue la de sentar juntos en la misma mesa a Lerroux y a los representantes catalanistas". El estudio parlamentario del Estatuto, como ha señalado Ruiz Manjón, produjo graves tensiones dentro del partido de Lerroux. La situación era difícil: por una parte había un gran número de radicales que se oponían al Estatuto. En Cataluña, por el contrario, los radicales eran acusados de traidores y anticatalanes (27).

En Castellón, el PR manifestó su conocida postura anticatalanista. las Cortes no podían acceder a la demanda autonomista de los catalanistas; se podía transigir en algunas áreas del Estatuto, pero especialmente la economía, la enseñanza y el orden público, debían ser funciones exclusivas del Estado:

Por encima de los catalanistas que, son en sus amenazas como el enano de la venta, está el interés nacional que no puede supeditarse a las conveniencias de unos cuantos contra los demás (28).

Hasta un buen periodista, como J. Bort-Vela, comentarista político del diario castellonense "República" ponía el dedo en la llaga en un artículo suyo, publicado en su habitual sección "HORARIOS" titulado significativamente "Castellón no puede ser un feudo de Cataluña". En el artículo de Bort-Vela, más que una erudicción histórica lo que más llama la atención es la referencia sensible diferenciadora de Cataluña.

(...) Cataluña tiene su personalidad definida; pero Valencia, la región o el País valenciano, y con ella Castellón provincia, también posee su personalidad típica e inconfundible (29).

Para Bort-Vela, que, por supuesto, interpretaba una opinión muy generalizada en Castellón, entre Cataluña y Castellón "se interpone la barrera infranqueable del Ebro" (30). Y en su vehemencia de perfilar diferencias, citando al historiados catalán a raiz de unas conferencias sobre la España pre-romana en la Universidad de Madrid, Bort-Vela acepta la tesis de Bosch Gimpera de que los edetanos de Castellón eran distintos a los del resto de España y estas diferencias se acentuaban con respecto a los de Cataluña. El colaborador de "República" efectúa un largo "iter" histórico y cultural de la personalidad diferenciada como pueblo de Castellón, con indudable acento localista o provinciano, como se quiera, pero que evidencia la alergia del PR-CS ante el catalanismo.

(....) no podemos permitir que dentro de Valencia y Castellón se haga política catalana y catalanista porque ello sería ir contra nuestros propios intereses (...) (31).

El sector catalanista de Castellón, agrupado en Esquerra Republicana del Pais Valencià, defendía con tenacidad las tesis republicanas "Catalunya no está sola, que al seu darrere tots els partits d´esquerra espien els seus moviments per a seguir el mateix camí" (32). La constitución de este grupo político en Castellón excitó todavía más la sensibilidad del PR-CS. Se acusaba a "Esquerra Republicana de querer convertir a Castellón en la cuarta provincia catalana" (33). El enfrentamiento llegó hasta límites muy sensibles para el PR-CS. Los de "Esquerra", los "esquerritas" como los llamaba el diario "República", seguramente por su limitada identidad, no sólamente no asistieron a la profesión cívica que cada año conmemoraba el sitio de Castellón por el general Cabrera, sino que además organizaron un acto político en la misma hora del homenaje de los defensores de la Libertad. El desafío era muy fuerte (34). Los enfrentamientos llegaron a tal grado de acritud que desde el PR-CS se amenazó a los de Esquerra con utilizar la Ley del Talión.


 (...)El Partido Radical de Castellón está en pie con toda su potencia y virilidad, dispuesto a responder al ataque con el ataque, a la persecución con la persecución, al insulto con la respuesta contundente y no se dará esta desde detrás de un micrófono, sino cara a cara (35).


3.1.2.4.  NOTAS.

(1)        cfr EC, 18/1/1.918, "Regionalismo", por Vicente Gea. Vid apéndice.

(2)        cfr R, 14/11/1.932, "La Autonomía de las regiones".

(3)        cfr Francisco Almela y Vives. VALENCIA Y SU REINO. op. cit. p 27. Sobre el catalanismo puede consultarse el apartado titulado "Puntualizaciones sobre un concepto amplificado: Cataluña", pp 27-31. El autor hace una sucinta, pero sustanciosa diferenciación entre Cataluña y Valencia.

(4)        cfr "Las Provincias", 10/12/1.987.

(5)        cfr Alfonso García Gallo. EL ORIGEN Y LA EVOLUCION DEL DERECHO I. Madrid 1.971, p 619 (referencia 1.123).

(6)        cfr Lluis Revest. Citado por Vicente Pitarch en su prólogo del libro de Pérez Moragán. LES NORMES DE CASTELLO. p 18. Idéntica afirmación es definida por Salvador Guinot, como presidente de la Sociedad Castellonense de Cultura, desde el BSCC, Tomo XI. enero-febrero 1.930, Cuaderno I. "La nostra veu. Per a la reglamentació ortográfica" pp 304-306.

(7)        cfr "Ayer y Hoy", Año I, 1.902, nº 9, p 155. NOTAS VALENCIANISTAS. Réplica a Gaetà Huguet por José Nebot y Pérez.

(8)        cfr en la misma revista de "Ayer y Hoy", Año I, nº 13, 1.902. NOTAS VALENCIANISTAS. pp 229-234. Gaetà Huguet replica a José Nebot afirmando que "lo renaxament de la llengua valenciana deu ser popular, no arcaich o acatalanat".

(9)        cfr Alejandro Lerroux. LA PEQUEÑA HISTORIA. p 387.

(10)      cfr Alfons Cucó. REPUBLICANS I CAMPEROLS. p 211.

(11)      cfr como muestrario del problema anticatalán los siguientes textos: Alfons Cucó, op. cit. pp 210-213; Manuel Ardit. HISTORIA DEL PAISOS CATALANS. pp 512-515; Joan Fuster, op. cit. pp 251-256; "La Veu de la Plana", 17/6/1.916, "La cuestió catalana", reproducido de ABC y firmado por Azorín quien denuncia los errores y exageraciones de ciertas posturas anticatalanistas un tanto extremadas.

Desde posiciones del PR-CS, véase: R, 25/7/1.932, "El Estatuto catalán y las doctrinas del federalismo", por Concha Peña, escrito ya citado; R, 25/2/1.933, "Panorama barcelonés. Sin novedad en los Pirineos..." escrito de Domingo Fuenmayor. Vid apéndice. Una interesante muestra de esta reacción, y desde la misma Valencia, puede estudiarse en el folleto editado por Unión Valenciana titulado "AHIR.... 1.932. LA PLAGA PANCATALANISTA (RETALLS DE PREMSA)" y que recopila una serie de artículos de Salvador Boty, publicados en "El Mercantil Valenciano", 23/10/1.932 "Sobre el Estatuto Valenciano. ¿El idioma valenciano catalán?; 30/10/1.932, (continuación del artículo anterior); 6/11/1.932, "Notas sobre el Estatuto valenciano. Pancatalanismo". Una muestra actualizada desde Castellón puede leerse en el Editorial de la Revista de la Asociació Cultural "Cardona Vives", nº 0, 1/1/1.987.

(12)      cfr "Rebeldía", 4/11/1.917, "Cambonismo", por José Castelló Soler. Vid apéndice.

(13)      cfr L, 20/1/1.922, "El valencianismo i Cambó", por V. Tomás i Martí. Vid apéndice.

(14)      Ibid.

(15)      Ibid.

(16)      cfr Raymond Carr. ESPAÑA 1.808-1.939, p 528.

(17)      Ibid.

(18)      cfr EC, 2/12/1.918, "El catalanismo y los republicanos. Opinión de Fernando Gasset". Vid apéndice. La independencia de Cataluña a la que se refiere don Fernando Gasset debe entenderse como autonomía en un sentido muy amplio, nunca en la separación política de España en un sentido total, de todos los poderes del Estado. Lo apostilla el político castellonense cuando se le pregunta por los límites de la autonomía catalana: esta independencia supone el mayor número de atribuciones posibles para Cataluña, como tal ente intermedio situado entre la autonomía individual y la propia autonomía del Estado.

(19)      Ibid.

(20)      cfr Miguel M. Cuadrado. ELECCIONES Y PARTIDOS POLITICOS DE ESPAÑA. (1.868-1.931) p 803.

(21)      cfr op. cit. p 811.

(22)      cfr EC, 21/2/1.918, "Conferencia patriótica. Grandioso discurso de Fernando Gasset contra el regionalismo separatista. España sobre todo. La inmoralidad. La "Lliga" - El dinero electoral. En defensa de derechos. Gasset aclamado. Manifestación improvisada.- Vivas a Gasset y Santacruz- Hacia el triunfo".

(23)      cfr H de CS, 18/2/1.918, "El triunfo de los liberales". Sobre la intromisión catalanista y la inaplicabilidad del artº 29, véase EC, 21/2/1.918, ya citado.

(24)      cfr EC, 21/2/1.918. Sobre las actitudes del PR-CS respecto a la "Lliga" véase el discurso pronunciado por don Fernando Gasset en el Centro Republicano de la calle Ruiz Zorrilla, recogido en EC, 28/1/1.918. "En el centro Republicano. Discurso de Fernando Gasset. Autonomía y Regionalismo". Este discurso está también recogido en el libro, ya citado, de Antonio González Sobaco, pp 536-539. Las actitudes catalanistas de la campaña electoral quedan reflejadas en EC, 10/2/1.918, "A luchar por nuestra dignidad y decoro. Nosotros y ellos. -Contra el catalanismo y sus secuaces-. A la dádiva con la estaca.- Por la candidatura del Sr. Gea"; EC, 18/2/1.918, "Los regionalistas contra los republicanos. Introducción de la "Lliga".- Propaganda"

(25)      Sobre las tensiones anticatalanistas originadas en estas legislativas, cfr EC, 25/2/1.918, "Las elecciones de ayer. Santa Cruz diputado"; H de CS, 18/1/1.918. Este periódico dispensa un saludo muy cordial a los catalanes. Francisco Avinent, de Castellón, regionalista, presentará a los oradores. Se comentan contactos entre mauristas, juanistas y regionalistas; H de CS, 19/1/1.918, "Propaganda regionalista. Final de la tarde de ayer". El acto regionalista suscitó un gran interés en Castellón. La mesa presidencial ostentaba las barras catalanas. Al intervenir el orador Ferrandiz, valencianista, fue interrumpido por insistentes gritos:

"- ¡Que hablen en castellano! decían unos

“- ¡Que hablen el español!

- ¡Viva España!"

En uno de los palcos, según el cronista de el "Heraldo" apareció una pancarta que decía: "¡Traidores!". A la salida del acto se increpó agresivamente a los oradores valencianistas; "El liberal", órgano del partido romanista, 23/1/1.918, "El mitin del viernes. Nuestra protesta". Mitin en el Teatro Principal organizado por la Juventud Regionalista de Castellón. El periodista se queja de que el griterío de parte del público asistente impidió que los oradores se expresasen en valenciano; EC, 21/1/1.918, "Propaganda contra la Patria" -reproducción del artículo publicado en el diario "Libertad y patria" de Albacete-. Pone como ejemplo el comportamiento patriótico de los republicanos de Castellón como medio de detener al regionalismo; H de CS, 28/1/1.918, "Regionalismo. Conferencia del señor Gasset".

(26)      cfr EC, 25/2/1.918, "Las elecciones de ayer. Santa Cruz diputado".

(27)      cfr Antonio Ruiz Manjón. op. cit. pp 309-316.

(28)      R, 2/5/1.932, "De actualidad: lo del Estatuto". Vid apéndice.

(29)      R, 22/6/1.934, "Horarios. Castellón no puede ser un feudo de Cataluña", artículo firmado por J. Bort-Vela. Vid apéndice.

(30)      Ibid.

(31)      Ibid. El artículo citado de J. Bort-Vela es una buena muestra del sentimiento anticatalanista que predominaba en el PR-CS. Véase sobre el mismo tema: "El Pueblo", 18/7/1.933; R, 7/11/1.934, "Lo que pasa en Barcelona. El españolismo de la "Lliga" -sic-", colaboración de Domingo de Fuenmayor y "Lo que pasa en Barcelona. Una conciencia teatral que explica muchas cosas" del mismo colaborador, Domingo Fuenmayor. Vid apéndice; R, 17/1/1.936, "No hay que confundir", Domingo Fuenmayor. A propósito de la proclamación del Estat Català, el citado colaborador de "República" dentro de sus conocidas tesis anticatalanistas apostilla: "Pero ¿mártires aquí? ¿Héroes aquí?. ¡A ver si va a salirnos con que es un héroe y un mártir don Ventura Gassol!". Vid apéndice.

(32)      cfr "Esquerra", 23/6/1.934, "Catalunya en pie". Enric Soler Godes.

(33)      R, 3/8/1.934, "Manejos catalanes".

(34)      cfr R, 9/7/1.934, "Esquerra valencianista insultó a los participantes en la procesión cívica que conmemoraba el asedio de Castellón por el general Cabrera"; R, 10/7/1.934, "Conductas", sobre las actitudes de "Esquerra" véase el nº correspondiente al 23/6/1.934 y particularmente el artículo firmado por Enric Navarro titulado "Autonomisme i esquerrisme". Vid apéndice.

(35)      cfr R, 10/7/1.934, "Nuestra posición. Una gota es suficiente para hacer rebosar el vaso. Esta gota ha caído y el vaso rebosó".

Nota: Es pot llegir l´articul sancer en la pagina web de l´Associacio Cultural Gregal: 

http://www.gregaldigital.info/index.php?option=com_content&task=view&id=3418&Itemid=75

cites

La llengua te vida propia independent, lliteratura propia i pot formar la seua historia d’evolució morfológica dende que s’emancipa de sa mare. El dialecte no pot tindre vida independent, ni molt menys lliteratura propia; per lo tant, rigause d’aquells que sostenen que el valenciá es un pur dialecte; eixos no han llegit nostres clássics del sigles XIV, XV, XV, i XVII.
Lluis Fullana i Mira (1916)

diccionari

corrector

LINKS

Per un domini punt val
junts front a la AVL
El teu nom en valencia
Associacio d´Escritors en Llengua Valenciana (AELLVA)
Mosseguello

NAVEGA EN
VALENCIA

 

Entrar com
a usuari

Nom d'usuari:
Contrasenya: