Per Víctor Boné Vidal
Aunque los tiempos que corren, son díficiles, no tenemos de que preocuparnos, nuestro estado tiene esa habilidad de permitir que todo el mundo meta la mano, y siempre se saque. De los principios de los 90, cuando el señor Roldán compró munición a un compinche filipino y dejó heridos a varios guardias civiles. De las vagas explicaciones de donde procede su abultado patrimonio, cuando su particular "inversión" empezo con un simple carné de afiliado socialista, hasta los "te quiero un huevo", han pasado casi dos décadas. Tiempo el que este "estado del bienestar", como así le llaman, ha sido y es el compañero de viaje perfecto, de malversadores, chorizos, vividores, y garantes de la palabrería y como no de su bolsillo. Mientras, no ha cesado la apertura de instituciones públicas, que han servido de entramado, para colocar a todos estos allegados que forman la pirámide del voto cautivo, y el sostén de este sistema tan beneficioso para unos. Pena és que hay gente válida y próspera, en los partidos de los roldanes y te quiero un huevo, pero esta al final acaba siendo sumisa a las malas artes de sus compañeros. El sistema nos ha impuesto in-crescendo, asalariados políticos en demasía, que no dejan de crecer, junto a sus bolsillos. ¿Tan bobos somos, de vivir en esta ignorancia capilarizada?
No crean en el voto útil, con ello estamos facultando la supervivencia de este sistema corrupto. Ya es de escándalo general, las tramas de financiación a partidos políticos con fondos públicos. La banca nunca ha considerado pérdida la deuda de los partidos políticos, sino como una inversión negociada. Con todo ello la retórica democrática de los partidos es falsa por eso saben que hay que plantearse generar una opinión pública verdaderamente democrática donde el pueblo realmente protagonice y gestione su vida personal y colectiva, camuflada bajo este entramado. Para más inri, los mecanismos legales, fiscales y judiciales para el control financiero de los partidos políticos están totalmente anulados en la práctica, por lo que se puede afirmar la existencia de un estado de corrupción consentida generalizada. ¿Siguen creyendo que esto es democracia?